Hace pocos días una persona muy querida me pidió una lista de libros para leer. Como al personaje de Gatsby, desde pequeño me gustan las listas. Se puede decir que me he pasado la vida confeccionando listas, y aún hoy sigo haciéndolas. Mis hermanos se reían de mí cuando me veían añadir una lista más. En cambio no me gusta mucho ni siquiera sugerir a nadie qué debe leer: se trata de algo tan íntimo: yo como es natural desconozco en qué momento está cada cual o porqué puede alguien querer leer algo concreto en un momento determinado. Hace muchos años que aprendí que leer se parece al respirar, al pasear o al mismo vivir. Se va haciendo sin proponérselo, una cosa lleva a otra, cada quien tiene su modo de desenvolverse, su camino, su aventura. Pero en fin en este caso me pudo el cariño y a dicha persona le ofrecí esta cadena de quince joyas:
Diario de invierno, Paul Auster
Postales de invierno, Anne Beattie
Las fuentes del afecto, Maeve Brennan
En lontananza, Siri Hustved
Minuto de silencio, Sigfried Lenz
Los últimos testigos, Cynthia Ozick
La casa de la infancia, Marie Luise Kaschnitz
Memorias de África, Isak Dinesen
Una mañana en la costa, William Styron
Madame des Treimes, Edith Wharton
El vino de la soledad, Irene Nemirowsky
Verano y amor, William Trevor
La última noche, James Salter,
El tiempo de los regalos, Patrick Leigh-Fermor
La noche de mayo, Clement Rosset
Sillas Eames, suelos de madera y libros. No me puede gustar más.
(Bueno, añade una taza de té y una buena manta.)
a ver querida Berta, ¿pero no estábamos hablando de libros? jajaja, gracias por tu comentario, tan atinado como siempre
Perdón por volver a comentar sobre la foto… ¿Es tu salón?
Me tengo que buscar un pretexto para ir a verlo.
Sobre la lista, me la guardo. Ahora justo estoy leyendo “Los últimos testigos”.
mi salón, ¡qué va!
un abrazo fuerte querido Andoni
¡ay de mí! sólo puede dejar una señal en volandillas. El item encendió todo mi ser. Quisiera enviarle la lista que nos dió Jacques Roubaud, con sus comentarios. 99 novelas (la “contrainte” era de hacer un surtido de novelas, y sólo novelas). Tengo (la lista JR más, apuntado “a la loca” (la palabra es un préstamo de una costurera en Vejer de la Frontera, nació en un pueblo llamado Librero…) todo en un cajón del computor. Prometo conseguir enviarselo. Sea como sea. Por pura afición a LAS LISTAS. Aun, listas of things-to-be-done, por el placer que es to cross out one item after the other, once DONE. Lo siento, ni tuve tiempo para escribir corto, tampoco para buscar y enviar la lista JR. Pero: otra y otra vez, ¡gracias! me entusiasmó. H.
¡¡¡grande grande Roubaud!!! uno de los pocos, verdaderos, poetas vivos
gracias amiga
Àlvaro…. No sé si no me entero. Sólo veo 14… Espero que no sea la mejor la que falta… Aunque si va detrás de los regalos, debe hablar del disfrutar de ellos.
Bonito paso del año. Punto de partida invierno. Ya estamos casi en primavera