Parábola/Distancia

Parábola (Enseñanza en parábolas)
Esencia de la parábola: palabra espaciosa, acogedora, en la que se puede entrar, de la que se puede salir. “Si alguien entra por Mí, será salvado; entrará y saldrá, y encontrará pastizales” (Jn, 10,9). Palabra no parcial, sino habitable: palabra-paraíso. “Si permanecéis en Mi, y mis palabras permanecen en vosotros” (Jn. 15,7).
Distancia (Amor y distancia)
No amamos bien sino a distancia. No amamos bien sino con la distancia adecuada. Demasiado cerca, nos ahogamos. Demasiado lejos, sucumbimos. La distancia del amor es el infinito: aquella en la que Dios mismo se mueve, y en la que nos movemos entre nosotros cuando nos amamos en Dios. Por que las Tres Mismidades se aman a Distancia, y esa Distancia en ellos es infinita, de ahí que Ellos sean Infinitos.
(De François Cassingena-Tréverdy, Étincelles, Ad Solem, 2004. La foto es de un tapíz de la cultura Nasca, de los Andes Centrales, del 200-440 d.C).

6 Comments Parábola/Distancia

  1. Icíar 13/11/2009 at 12:18

    ¿Por qué tiene que ser todo tan complicado? Creo que no le voy a alcanzar nunca.

    Pero… le sigue leyendo, que lo sepa.

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  2. delarica@unav.es 13/11/2009 at 12:25

    pues no lo sé, la verdad, pero gracias de todos modos

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  3. Eterna 13/11/2009 at 13:40

    Pero siempre hay que tantear el terreno, hasta descubrir cuál es la distancia adecuada.Porque me parece que es una variable. Y de consejos…nunca aprendemos. Somos experienciales.Y debemos aprender a amar.

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  4. delarica@unav.es 13/11/2009 at 15:00

    completamente de acuerdo, como casi siempre, tiempo para medir el espacio

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  5. paisajescritos 16/11/2009 at 19:27

    "Demasiado cerca, nos ahogamos. Demasiado lejos, sucumbimos". ¡Qué bien explicado! Creo que son dos afirmaciones inseparables que pillan (nos pillan) de lleno a más de uno. Y la muerte en ambos extremos, más precisa en la cercanía. Tal vez no entienda bien, pero el amor a distancia (claro que hay que medir) suele ser doloroso si no hay suficiente madurez. El mismo texto, veo, da la respuesta…

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  6. delarica@unav.es 16/11/2009 at 20:24

    este libro, Étincelles, de Cassingena-Tréverdy, que me traje de mi último viaje parisino, y que allí está siendo una auténtica iluminación para mucha gente, es lo mejor que he leído este 2009; es el libro de toda una vida, para toda una vida: asombroso, te lo recomiendo vivamente

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