Ayer he disfrutado un montón con el libro que Fernando Savater ha dedicado a Jorge Luis Borges y que se titula Borges: la ironía metafísica (Ariel, 2008). El título es un poco engañoso. Me explico: el libro, en la mejor tradición lectora, es un repaso por la vida y la obra de Borges. Breve, ameno, de una escritura impecable, sencillo. Savater, ya lo sabíamos (La infancia recuperada), es un gran lector, es más, yo diría que es sobre todo un buen lector. Además, cosa rara siendo filósofo, sabe muy bien lo que es la literatura. No la utiliza como un ejemplo de otras cosas. La conoce, admira y respeta en lo que es. Además Savater lleva fascinado con Borges desde hace cincuenta años. Y nos lo cuenta. Sencillamente. Digo que es engañoso el título porque podría parecer que se trata de un estudio filosófico sobre el escritor argentino y universal. A la postre, resulta serlo, pero por el camino de la más absoluta sencillez.
Si queréis leer una buena introducción a Borges, os lo recomiendo vivamente. Hacía tiempo que no disfrutaba tanto con un libro. Una invitación a la lectura, a la inteligencia, al placer.
(La foto de Borges la tomó Ferdinando Scianna en la visita del maestro a Sicilia. Pocos han entendido a Borges como Savater y Scianna, y me alegro de poder reunirlos en este post)
Tomo nota del libro, gracias por la sugerencia. Me gusta mucho Borges y Savater es un excelente divulgador. Una buena combinación.
Gracias a ti, Javier. No creo que te arrepientas, y de nuevo gracias por pasarte